años se hizo un tatuaje con caracteres chinos que, entendía, significaba “Mamá”. Lo que no
sospechaba es que el personal del citado estudio de tatuajes desconocía por completo este
completo idioma y le había puesto en su tatuaje “Amigo venido del infierno”.
La detección de tal circunstancia le vino por el terror que le provoco a una mujer china, cuatro
años después, tras ver el tatoo y conocer realmente su significado sobre la espalda de
Charlene.
Sabedora de lo que ponía realmente su tatuaje por la indicación de la mujer oriental,
Charlene optó por añadir a su tatuaje símbolos menos ambiguos y de lectura universal,
incluyendo un motivo floral y el nombre de su hija, todo ello en alfabeto latino.