11 abril 2015

ESPEJOS Y CRISTALES MAGICOS




Por Juan E. Ferrer (www.nueva-acropolis.es/cultura): Fuente principal

HISTORIA DEL ESPEJO
       No se sabe con seguridad cuándo apareció el espejo en la vida del hombre; lo cierto es que se encuentra desde la más remota antigüedad, en los mismos albores de la Humanidad. Se han encontrado espejos en todas las civilizaciones, en América, Asia, África y Europa. Para aquellos hombres además tenía una finalidad religiosa y mágica, y se utilizaba de muy diversas formas. Los espejos como utensilios de tocador y objeto manual fueron muy usados en las civilizaciones egipcia, griega, etrusca y romana.

El espejo de mano ya se conocía en Egipto en el año 4,000 a. C., estaba hecho de bronce (metal pulido), el reflejo de la imagen era dudosa, duraba poco y era muy caro por lo que lo usaba la clase rica. Como curiosidad es bueno saber que los hebreos de la antigüedad llevaban barba. Ahora bien, la Biblia dice que José se afeitó antes de comparecer ante el faraón (Génesis 41:14). ¿Por qué lo hizo? Para seguir la costumbre y el protocolo de los egipcios, para quienes el vello facial era algo sucio. De hecho, en las tumbas se han encontrado estuches de belleza con navajas, pinzas y espejos.

A través de diferentes hallazgos arqueológicos se ha podido comprobar la existencia del espejo en numerosas civilizaciones antiguas. Entre las primeras se encuentra el Antiguo Egipto, a quienes muchos llegaron a atribuirle el invento, por entonces, bastante rudimentario.

Fuera para maquillarse o ajustarse la peluca, las mujeres egipcias ya se miraban en los espejos. Eran de cobre pulido y al ser muy costosos, estaban reservados a los príncipes y a los nobles.
































También aparecen en la cultura hebrea, ya que era parte de la fuente de metal que estaba a la entrada del Tabernáculo de la Reunión – Vea Éxodo 38:7-9; 30:18-.
Se elaboraban con metal bruñido, de cobre, plata o bronce, proceso conocido como plateo. El hallazgo de un espejo de bronce junto a candelabros y otros objetos logró determinar la existencia de la comunidad judía en Corintio.

En el siglo I de la era cristiana, Plinio el viejo mencionó el vidrio con la cara posterior recubierta de plata o estaño.Según Plinio la factoría más importante de espejos se encontraba en Brindisi - Italia; pero este proceso de plateado no tuvo amplia difusión hasta el siglo XIII, cuando los venecianos idearon una manera apropiada para realizarlo.

Posteriormente en 1835, el químico alemán Justus von Liebig inventó el moderno procedimiento de plateado

Más tarde los romanos utilizaron la plata de ley que mejoraba la definición de la imagen.



Foto de Espejo en miniatura de la Época Romana (siglos I - IV d.C.)
Realizado en plomo, altura 2,5 cm. diámetro 4,4 cm. grosor 0,3 cm. Este minúsculo objeto es una ofrenda. Al dorso, se pueden ver las Tres Gracias. Las muchachas personifican la juventud, la belleza y la pureza, es un tema familiar en el mundo helenístico y romano.


Una clase particularmente representativa de la artesanía etrusca es la de los espejos de bronce, decorados con grabados o, más raramente, con relieves sobre la superficie opuesta a la parte a la que refleja la imagen. Se distribuyen cronológicamente entre el s. VI y el III a.C., con particular desarrollo en el s. IV a.C. Este famoso espejo representa a un viejo arúspice concentrado en examinar el hígado de un animal sacrificado para leer los agüeros. Una inscripción etrusca lo califica como Chalchas, o sea, el mítico adivino griego Calcante aquí representado en la versión iconográfica etrusca con el atributo de las alas, evidente connotación que recalca su función de mediador entre la realidad terrena y el mundo trascendente. Nótese el pie apoyado en una roca, acción esencial en el proceso adivinatorio por parte del arúspice quien, de esta manera, establece un contacto con lo terrenal como sede de la esfera natural y del mundo subterráneo.



Foto de ‘Espejo grabado con Calcante’  Vulci. - Finales del siglo V a.C.
Bronce fundido Alto 18.5 cm, diám. 14.8 cm. - Inv. 12240 - Vat.

También cuenta la leyenda, que cuando los europeos llegaron a América (1492), trajeron consigo el espejo moderno (los nativos ya elaboraban espejos artesanales), y era tal la impresión de los nativos americanos que llegaron a realizar un trueque por oro.


Foto de Espejos de bronce o lirpu (N°15 tumba femenina 26, N°16 y N°17 en torno de la Roca de la Serpiente, y N°18 en cueva junto a la Roca de la serpiente) en Machu Picchu.
 Foto de Museo Machu Picchu de la Casa Concha, Cuzco

Durante la alta Edad Media, apenas se hizo uso del espejo, hasta que en el siglo XIII se inventó la fabricación de los de vidrio y de cristal de roca sobre lámina metálica (o con amalgama de plomo o estaño que son los espejos azogados), sin dejar por esto de construirse los de sólo metal hasta el siglo XVIII. El espejo fabricado en cristal de roca o vidrio nació en la isla italiana de Murano- Venecia en torno a 1350 por dos artesanos Dominico y Andrea, refleja la luz o imagen proyectada sobre ellos, es considerado un utensilio de tocador por sus virtudes reflectoras.

Más tarde se fabricaron con una superficie pulida de cristal, cubierta en su cara posterior por una capa de mercurio o por una plancha de aluminio, en la que se reflejan la luz y las imágenes de los objetos.

El espejo, como mueble de habitación, empieza con el siglo XVI, pues aunque durante los dos siglos anteriores se citan algunos ejemplares históricos apenas era conocido y su uso era poco corriente.

En dicho siglo XVI, se presenta con marco elegante y pie artístico y ocupa lugar distinguido en el salón como objeto movible y de dimensiones reducidas. Hacia fines del siglo XVII las fábricas venecianas logran construir espejos de gran tamaño y desde entonces sirven como objetos singularmente decorativos en los salones, en los que ocupan un lugar destacado.

Los espejos modernos consisten de una delgada capa de plata o aluminio depositado sobre una plancha de vidrio, el cual protege el metal y hace al espejo más duradero.



Foto de salar de Uyuni  en Bolivia

Pareciera que estos turistas caminaran sobre el aire, pero en realidad están de pie sobre el espejo natural más grande del mundo. El asombroso fenómeno ocurre cuando el agua cae en el Salar de Uyuni, un desierto de sal en Bolivia, que de hecho es el más grande del mundo. El suelo es tan plano que cuando llueve, no hay ningún lugar para que se drene el agua y como consecuencia se crea un efecto de espejo que refleja el cielo. Y el efecto lo convierte en un impresionante espectáculo.


FORMAS Y HECHURA DE LOS ESPEJOS
Los primeros espejos se elaboraban siempre con metal bruñido (oro, plata, bronce, latón, cobre, acero) a este proceso se le conoce como plateo o bien de vidrio laminado con plomo. Estos se conservan en el Museo Arqueológico Nacional de Nápoles. En algunos casos hechos de obsidiana, que es un vidrio natural de origen volcánico de color negro o verde muy oscuro.

Cuanto más pulido o menos poro tenga dicha superficie, más nítida es la imagen reflejada. Es muy probable que los primeros espejos de cristal fueran fabricados por los romanos. Tenían forma de placa redonda u oval, respetando la tradición etrusca, decorada ordinariamente con grabados o relieves mitológicos en el reverso (los romanos carecen de grabados, pero no de relieves) o forma cuadrada, modelo muy difundido y común durante todo el Imperio romano, con mango tallado para asirlos cómodamente; mangos finamente trabajados tanto en metal como en hueso o marfil.

Los espejos mágicos pueden ser de muchas clases: cristalinos, metálicos, incluso de grafito; deben ser en general ovales, ligeramente cóncavos... aunque se aceptan multitud de variantes. Vemos que el nombre de "Espejo Mágico" es una denominación genérica donde los instrumentos de adivinación no son solamente espejos, sino que pueden ser bolas de cristal, copas de agua, perlas, piedras preciosas, etc. Uno de los espejos mágicos más célebres de la literatura oculta es un cristal de carbón que estaba en posesión de John Dee, ocultista inglés que vivió en el siglo XVI.

Otro instrumento que se podría considerar un espejo mágico es la cubeta de madera negra del médico austriaco Anton Mesmer, en la cual María Antonieta vio reflejarse en sus turbias aguas todo el desenlace de la Revolución Francesa, incluyendo la muerte de sus amigos, del Rey y de ella misma.

SIMBOLISMO DEL ESPEJO
El agua fue nuestro primer espejo. En los países orientales por ejemplo son muy cautelosos con los espejos, pues creen que detrás de estos objetos hay un mundo desconocido lleno de seres, espíritus y fantasmas que pueden atraparnos en esa dimensión.

Se ha dicho del espejo que es símbolo de la imaginación o de la conciencia, ya que tiene la capacidad de reproducir los reflejos del mundo visible en su realidad formal. Scheler y otros filósofos lo han relacionado con el pensamiento, pues es en el vehículo mental donde se produce la autocontemplación y reflejo del Universo. Es en este sentido que el espejo se relaciona con el simbolismo del agua reflejante y el mito de Narciso.

También aparece con frecuencia en leyendas y cuentos infantiles convertido en mágico, ya que es capaz de proyectar imágenes que ocurrieron en el pasado o que ocurrirán en el futuro, o simplemente ver en el presente lo que está sucediendo a mucha distancia. Los espejos de mano, en China están relacionados con la felicidad conyugal y tienen cierto poder contra las influencias diabólicas.

Además de relacionarse con el agua, también lo hacen principalmente con la Luna, precisamente por su condición reflejante y pasiva, pues reciben las imágenes, -como la Luna- de la luz solar. Los mejores espejos son los que se realizan con plata, metal consagrado a la Luna y mineral que nuestros antepasados creían que era producto de los propios rayos de la luna. En el templo de Coricancha (Cuzco) había un santuario consagrado a la Luna, recubierto sus paredes totalmente de plata. Así, el espejo y la plata aparecen relacionados con todas las diosas lunares, ya que forman parte de sus atributos y emblemas.

Para Loeffler, los espejos son símbolos mágicos de la memoria inconsciente (como los palacios de cristal). El cristal, como parte integrante de los espejos, se une a su simbolismo de autoluminosidad, de visión interior perfecta y de pureza. En la Alquimia el cristal simboliza la perfección espiritual. Pero es la transparencia la que hace que el cristal exista y no se vea, a la vez que deja ver a su través, convirtiéndose en un intermediario entre el mundo visible y el invisible, y por tanto en una base simbólica de la sabiduría, la adivinación y todas las facultades y poderes misteriosos del hombre.

EL ESPEJO EN LA MAGIA
Una de las diosas que se sirven de su espejo mágico es la diosa egipcia Isis. Recordemos que en el mito, Osiris es el hermano-esposo de Isis, el cual será despedazado por Seth y sus fragmentos esparcidos por el mundo. Gracias a sus artes mágicas y con la ayuda de su espejo, Isis localizará los pedazos de Osiris para poder recomponerlo y devolverle la vida. Este espejo se encuentra en la barca de Isis o barca lunar (la Luna), y en él quedó impreso el llamado Ojo de Horus, que es signo de videncia, espiritualidad y poderes ocultos, equivalente al Ojo de Dangma hindú. El Ojo de Horus es el Oudjat, el ojo de la visión justa, y se relaciona con el llamado Tercer Ojo, el cual despierta la clarividencia en el hombre.

Los espejos negros -confeccionados con obsidiana- quizás sean uno de los elementos más relacionados con la Magia. Según H.P. Blavatsky, estos espejos se fabrican en la provincia india de Agra; en el Tibet; en la China y también en Egipto, de donde parece ser que lo introdujeron hace muchos miles de años en México los antecesores de los actuales mayas. Según la tradición, cuando desembarcaron los españoles, el Rey de los quichés ordenó a sus sacerdotes que consultaran el espejo para saber el destino del país.

Los romanos también emplearon espejos negros de obsidiana. Así por lo menos lo afirma Plinio respecto del procedente de Etiopía, y parece que se empleaban particularmente para adosarse a las paredes. "La imagen que reflejan estos espejos -dice Plinio- parece una sombra, en la cual se ven los rasgos del objeto, pero no los colores: es una representación más bien oscura del objeto".

Actualmente Raymond Moody, Profesor de Psicología de la Universidad de Carrolton (Georgia) está realizando de forma científica, el concentrarse en un espejo donde los sujetos ensayan regresiones a vidas pasadas y materializaciones de seres queridos muertos.

LOS ESPEJOS Y LA ADIVINACION
Donde más han destacado los poderes de los espejos es en el arte de la adivinación. Pero el verdadero sentido etimológico de la palabra es divinari, es decir, ejercer la divinidad. Los dos signos de la divinidad humana, o de la humanidad divina, son las profecías y los milagros. Ser profeta es ver por anticipado los efectos que existen en las causas, es leer en la luz astral; hacer milagros es obrar valiéndose del agente universal y someterle a nuestra voluntad.

Parece ser que Nostradamus, según cuenta la leyenda y las tradiciones orales, utilizaba una bola de cristal de cuarzo para ver el futuro y de esta forma confeccionar sus profecías. Los instrumentos de adivinación no son otros que los medios de magnetizarse a sí mismo y de distraerse de la luz exterior, para estar atentos únicamente a la luz interna.

Por eso Apolonio de Tyana se envolvía por completo en un manto de lana, y fijaba en la oscuridad su mirada sobre el ombligo. El espejo mágico de Du Potet es un medio análogo al de Apolonio. La hidromancia (adivinación por el agua) y la visión en la uña del pulgar, bien igualada y ennegrecida, es una variante del espejo mágico; el agua o el color negro absorben los rayos visuales, produciéndose entonces un desvanecimiento, un vértigo que va seguido de lucidez en los sujetos que tienen para esto una aptitud natural, y que están convenientemente predispuestos.
Pausanias nos dice: "Delante del santuario de Deméter hay una fuente, entre ella y el templo se alza una tapia y hasta ella llega un camino desde el exterior. Allí hay un oráculo muy seguro, no sólo para las consultas, sino para la curación de las enfermedades: atan un espejo con una cuerda fina y lo dejan caer sobre la fuente de forma que no se hunda en ella más que para que el agua toque su círculo. Entonces ruegan a la diosa y queman perfumes, después de lo cual miran el espejo, el cual indica si el enfermo vivirá o morirá. Tan verdadera es esta agua. En Cianeas, junto a Licia, hay un oráculo de Apolo Tirxeo que es también una fuente en la que mira el que quiere saber algo".

W. Wynn Wescott nos dice: El Espejo Luminoso, llamado Aspaqularia Nera, es un término cabalístico que significa el poder de previsión y de visión a distancia, de profecía, tal como lo tuvo Moisés. Ordinariamente los mortales tienen sólo el Aspaqularia della Nera o Espejo No Luminoso, y sólo ven de un modo oscuro en el cristal.








LOS ESPEJOS EN LA RELIGION
Los espejos aparecen como atributo de las diosas en los mitos y ceremonias de casi todas las religiones antiguas diseminadas por el mundo. Así, en el Egipto de hace miles de años, cuando las aguas del mar salpicaban las patas de la Esfinge y la meseta de Gizeh era una isla, los sacerdotes realizaban una ceremonia secreta a la salida del sol, donde los primeros rayos del amanecer eran reflejados por un espejo de oro pulido que la Esfinge tenía en su frente, proyectándolos entre sus patas. También se han hallado en los sepulcros de la XIX dinastía espejos en forma de disco que encajaban entre los cuernos de la cabeza de la diosa Hathor, que probablemente estarían relacionados con la capacidad de adivinación de los dioses ctónicos.

Hubo una diosa o demonio femenino mesopotámico llamada Lamastu, que atacaba y seducía a los hombres y trataba de arrebatar los niños a sus madres. Era probablemente una representación más de la muerte y la enfermedad. Esta diosa en sus representaciones y conjuros llevaba siempre consigo un peine, un espejo y un huso, atributos los tres muy antiguos de feminidad, magia y transcurso del tiempo.

Entre los griegos hay varios mitos donde aparecen los espejos. Uno de ellos es el de Perseo, que tiene que matar a una de las Gorgonas, Medusa, la única que es mortal. Para ello el héroe se elevó por los aires con las sandalias aladas que le dieron las tres Gracias, mientras Atenea sostenía encima de Medusa un escudo de bronce bruñido a modo de espejo, para que el guerrero pudiese contemplar la escena sin tener que mirar a los ojos de la terrible Gorgona, que tenía la facultad de transformar en piedra a sus observadores, y de este modo pudo cortarle la cabeza.

También podemos recordar el mito de Narciso, joven de incomparable belleza e incapaz de sentir amor por nadie; una ninfa se enamoró de él, pero éste, sólo interesado por sí mismo, la rechazó. La ninfa murió de amor, por lo que la diosa Artemisa castigó a Narciso a enamorarse de su propia imagen cuando se viera en una fuente de agua.

Los romanos consagraron el lago Nemi, que tiene forma de cuenco, a Diana, diosa de la Naturaleza y de la fecundidad; allí los sacerdotes de su culto realizaban ritos y ceremonias lunares, por lo que el lago pasó a llamarse "el espejo de Diana", aunque estos cultos se realizaban incluso antes de la fundación de Roma.

El neoplatónico Plotino nos va a referir en sus Enéadas: "las almas humanas, al ver sus imágenes en el Espejo de Baco, se lanzaron desde lo alto hacia estas, pero sin cortar los lazos que las unen a la Inteligencia, hacia la que suben de tanto en tanto, cuando Zeus, compadecido, corta las ataduras que las ligan al dolor".

En el panteón azteca también tenemos varios ejemplos como el dios Tezcatlipoca, "el Señor del espejo humeante". Uno de los dioses más antiguos del panteón y quien rige las hechicerías y los encantamientos. Su oscuro espejo humeante está relacionado con la Luna, y estaba hecho con hielo arrancado de la Tierra Primera "aún no alumbrada por el sol".

También hay un pasaje relacionado con Quetzalcoatl, "la serpiente emplumada". Este era un Rey de pureza intachable, por lo que los demonios, no pudiendo resistir tanta nobleza, deciden perderlo. Para ello le sitúan frente a un espejo negro, en el que percibe por primera vez su cuerpo alterado, considerándolo feo e imperfecto. Sumido en la tristeza, los demonios aprovechan para embriagarle, y del espejo surge una figura femenina hecha de pura materia irradiante, que es su propia sombra o doble, y allí el Maestro pierde su pureza ascética.

Mientras en Europa los hombres preparaban las hogueras de San Juan en honor del solsticio de verano, en el hemisferio sur los incas festejaban el Inti Raymi, la Fiesta del Sol, en la que el monarca vestía sus galas más preciadas y lucía ornamentos de oro y plata que reflejaban la luz solar. La parte principal de la ceremonia consistía en renovar el fuego sagrado, que ardía durante todo el año. En esta ocasión era el mismo Sol quien lo encendía. Para ello los sacerdotes llevaban un brazalete llamado chipana, el cual tenía una lente que reflejaba los rayos del sol como una lupa, inflamando un algodón color carmín. Este tipo de espejos son llamados ustorios o ardientes; dos hechos históricos han dado celebridad a este medio de producir combustión desde lejos: Arquímedes abrasó en Siracusa la flota de Marcelo y Proclo quemó en Constantinopla la de Vespasiano. En cuanto a la leyenda, nos dice que los navíos atlantes, antes del hundimiento de su último resto llamado Poseidonis, llevaban unos espejos parabólicos enormes con los que incendiaban ciudades.

En el Japón encontramos el símbolo teológico del espejo, que es el emblema de la diosa Amaterasu, "el Sol". Dice su religión que la diosa enfadada se escondió dentro de una caverna y que el resto de los dioses fabricaron un espejo, que colocaron en la entrada. Amaterasu, llena de curiosidad, salió a ver su imagen reflejada. Este espejo era octogonal, y su representación es una flor de ocho pétalos con su centro rojo (la flor del cerezo), llamado Kagami, y sirve de representación al Judo. Ninigi, nieto de Amaterasu, recibe dicho espejo, que "habría de considerar como si fuera la propia alma de Amaterasu", ya que es uno de los emblemas sagrados, junto con la espada y las joyas, que se identifican con el poder imperial. Son estos emblemas los que recibe el Emperador en una ceremonia secreta de sucesión; si el espejo llegara a empañarse indicaría que el candidato no es digno de convertirse en Hijo del Sol. En los templos japoneses se custodiaba el Shintai o morada del dios, que en la mayoría de los casos era un espejo metálico.

LOS ESPEJOS Y LOS ELEMENTALES DE LA NATURALEZA

       Los espejos se hallan relacionados principalmente con los elementales del agua.
Entre los más pequeños están los que viven en la espuma del mar, que servían a los Magos que podían leer augurios en la reflexión de la luz lunar o Camino de Plata de la luna llena sobre el mar. Los tritones, que forman parte del séquito de Neptuno, responden al Trino Poder del Reflejo del Logos sobre el Gran Espejo o Cristal Negro de origen Terrestre e ígneo, guardado en Thule para la corona del Rey del Mundo. Las ninfas son expertas en encantamientos, metales mágicos y piedras preciosas en el seno de las cuales se pueden ver cosas lejanas, pasadas y futuras. Algunos del aire, como los elfos, gustan de la luz reflejada en los espejos no muy pulidos.

El espejo es una "puerta" a esa otra dimensión que es el mundo astral; de ahí proviene la tradición europea de dar la vuelta o tapar los espejos cuando ha fallecido alguien recientemente, para evitar su regreso o para que no les robara su alma. Los pueblos antiguos pensaban que el alma humana radicaba en la sombra o en la imagen reflejada en el agua o en un espejo; quizás sea por eso por lo que los vampiros no se reflejen en los espejos, pues no tienen alma.

LOS ESPEJOS MAGICOS DE JHON DEE


Retrato de John Dee conservado en el Ashmolean Museum de Oxford.

El Museo Británico de Londres cuenta entre sus tesoros con unas peculiares piezas que, durante los siglos XVI y XVII, fueron utilizadas por el sabio británico con fines mágicos y sobrenaturales. Quería contactar con los ángeles.
Jhon Dee (1527-1609) fue un consumado astrónomo y un destacado matemático y geógrafo pero, al igual que otros muchos sabios de su tiempo, mostró también un gran interés por disciplinas como la astrología, la magia o la alquimia.
Formó parte de la Corte de Isabel I de Inglaterra, convirtiéndose en su astrólogo personal.



Foto de los seis objetos mágicos conservados en el museo londinense (British Museum).

A partir de cierto momento de su vida —y de forma especial después de conocer a un siniestro personaje llamado Edward Kelly—, Dee se mostró especialmente interesado en hallar una forma de contactar con los ángeles. Los manuscritos de Dee dan a entender que estaba convencido de haber logrado dicho contacto, dejando constancia de lo que él denominaba "lenguaje enoquiano" —de los ángeles— que, según decía, le había sido revelado.
En total, son seis piezas "mágicas", en su mayoría rescatadas por el anticuario británico Sir Robert Cotton (1571-1631), cuya colección fue una de las que dieron forma al primitivo Museo Británico.
El peculiar legado de Dee está formado por tres "sellos" en forma de disco grabados con extraños símbolos mágicos —dos pequeños y uno más grande—, un espejo de obsidiana de origen azteca, un disco dorado y una bola de cristal. Sin duda alguna, el mejor equipo que todo mago podría desear.

HISTORIA DEL ESPEJO DE JOHN DEE
El 25 de mayo de 1581 el mago y alquimista John Dee conto que tuvo la visita de un Arcángel llamado Uriel que le entrego un espejo con el que podía abrir una puerta dimensional y comunicarse con seres de otros planetas.
Años más tarde, la casa de John Dee fue atacada y quemada intencionadamente y sus más de 4.000 libros de magia y documentos alquímicos fueron destruidos en el incendio. El espejo se salvó y hoy en día está bajo fuertes medidas de seguridad en el museo Británico. Como decía Heurtebise a Orfeo: los espejos son puertas, a través de ellos la muerte va de un lado para otro.
Este fabuloso espejo estaba hecho de Obsidiana altamente pulida y era uno de los muchos objetos de culto traídos a Europa después de la conquista del estado Mexica o Azteca por Cortés. Estos espejos eran asociados con Tezcatlipoca, Deidad de los gobernantes, guerreros y hechiceros y eran usados por los sacerdotes para la adivinación y las visiones.

TECNICA PARA VER EN LOS ESPEJOS
El método de trabajo mágico con espejos funciona con una técnica que en hipnosis se denomina fijación por la mirada. Hace miles de años las primeras técnicas de fijación por la mirada comenzaron a practicarse en las superficies calmadas de lagos, ríos o cuencos de agua. Con el comienzo de la edad de bronce comenzó a trabajarse en metal pulido.
Para sus experimentos de videncia, el mago necesita de un instrumento imprescindible: el espejo mágico.
Los espejos mágicos, nos dicen los manuales, son como ventanas que dan al plano astral.  La misión de estos espejos frente al experimentador es, sencillamente, la de actuar como órganos de condensación de la luz astral, la cual es luego controlada por el operador. Como dice muy bien Papús, los experimentos mágicos, aún los más ínfimos, exigen una gran tensión de espíritu, una calma absoluta y, sobre todo, una persuasión profunda de las dificultades que presenta la empresa acometida.

LA MAGIA DE LOS ESPEJOS
Otra de las leyendas que hay sobre los espejos, es que si uno sitúa un espejo frente a otro crea un portal infinito donde los espíritus pueden transitar libremente dentro del mundo de los vivos y su dimensión, la dimensión de las muertos. Para la cultura oriental, por ejemplo, los espejos están dotados de un gran poder místico y son elementos capaces de espantar a los espíritus malignos. También representaban una ofrenda al mundo espiritual y por ello eran colocados en las tumbas imperiales.

Los espejos también son considerados portales que comunican al más allá, o hacia otro mundo similar al nuestro pero donde nada es lo que parece. Muchos son los relatos de personas que afirman haber visto reflejados en ellos a seres que en realidad no estaban allí o a familiares que recién habían fallecido y se presentaban a modo de despedida. 


ESPEJOS Y HECHICERIA

          Por su capacidad para duplicar la realidad, los espejos han sido siempre un medio de acceso para la magia y lo sobrenatural, y ya en la Antigüedad el arte de la adivinación por medio de espejos, conocido como cristalomancia, era practicado por magos y arúspices de muchas culturas. Las antiguas brujas de Tesalia escribían sus oráculos en espejos con sangre humana. Se cuenta que enseñaron a Pitágoras a adivinar sosteniendo un espejo en dirección hacia la Luna.

Este tipo de adivinación adoptó formas muy sofisticadas a lo largo del tiempo y no sólo se utilizaban recipientes de plata, piedras preciosas y agua en un cuenco, sino también las uñas de los dedos muy pulidas. Los espejos muy bruñidos y pintados de negro en el lado convexo se consideraban excelentes instrumentos para desarrollar la clarividencia, de forma similar al uso de una bola de cristal. Catalina de Médicis y Enrique IV tenían espejos mágicos a los que consultaban con frecuencia. Alberto Magno y Cornelio Agrippa hacían predicciones con un espejo, así como Cagliostro.

         También John Dee, el mago real de la reina Isabel I de Inglaterra, utilizaba un huevo de cristal y un espejo negro de obsidiana. Un procedimiento habitual entre los adivinos consistía en sumergir un espejo de metal en el agua y según se viera el reflejo -desfigurado o claramente definido- se auguraba si la persona iba a vivir mucho o a 
morir.

En la Edad Media se creía que las imágenes formadas en una bola de cristal o en un espejo eran causadas por Dios o por los malvados demonios que habían quedado atrapados por la magia, pero modernamente se ha propuesto explicaciones naturales para las imágenes que afloran al pensamiento cuando se escudriña un espejo con fines adivinatorios: son los estímulos ópticos de la capacidad imaginativa los que provocan las visiones.



CURIOSIDADES 




BLOODY MARY O VERONICA  Muchas historias urbanas cuentan de apariciones malignas en los espejos luego de recitar determinadas frases frente a ellos y mostrando algún instrumento en particular.

El fantasma del espejo es una historia sobre un espíritu que aparece al ser pronunciado su nombre tres veces frente a un espejo. En España se conoce como Verónica. Suele formar parte de juegos infantiles. En EE.UU. hay una leyenda análoga protagonizada por Bloody Mary (“María la Sangrienta”) o Mary Worth,

El juego se presenta en diversas configuraciones, implicando el uso de objetos cotidianos, sobre todo un espejo y a veces un libro (a menudo, la Biblia) o unas tijeras (en memoria de las que causaron la muerte a Verónica.

La versión más común de la leyenda explica que se trata de una muchacha muerta durante la pubertad (a menudo, durante una sesión de ouija) y cuyo espíritu ha quedado atrapado entre el mundo de los vivos y el de los muertos. Sin embargo, algunas versiones la consideran hija de Satanás.

Lewis Carrol desarrolla magistralmente la idea del espejo como entrada a un mundo inverso (A través del espejo y lo que Alicia encontró allí) en la segunda parte de las aventuras de Alicia. Muchas cosas de las que acontecen en el libro parecen, metafóricamente, reflejadas en un espejo.

En el cuento de Blancanieves, el espejo tiene la facultad de hablar y responde a las preguntas que le formula la madrastra

En la novela Harry Potter y la piedra filosofal, de J. K. Rowling, aparece el espejo de Oesed (Deseo leído a la inversa), que no refleja la imagen de quien lo contempla, sino sus deseos más profundos.


También es notable el Espejo de la Sabiduría (en el que se refleja "todas las cosas del cielo y de la tierra excepto el rostro de quien se mira en él), descrito por Oscar Wilde en el cuento "El pescador y su alma".
En la mas reciente adaptación al cine de El RETRATO DE DORIAN GRAY 2009 el director del film hace uso de los espejos para mostar el alma de DORIAN

En el Antiguo Egipto se creía que estaban dotados de una fuerte espiritualidad y se colgaban frente a los difuntos junto con el ojo de Horus con la creencia de que le permitiría a quienes dejaban de existir en el plano físico, orientarse por los senderos del más allá.

Durante la edad media, los espejos se utilizaron en las Iglesias para atrapar demonios e interrogarlos. En el testamento denominado “La clavicula de Salomon” se explica como construir espejos mágicos y utilizarlos bajo la intervención del ángel Azrael.

Otro registro escrito de la utilización de espejos en las artes mágicas data del año 1458, y es el famoso libro “La magia sagrada de Abramelín el Mago” escrita por Abraham el judío; En ésta obra se explica con detalle como obtener visiones en un espejo.

Espejo negro

Con patrones celtas en las esquinas, el Espejo Negro es un instrumento de Scrying, un método de adivinación antiquísimo utilizado para la clarividencia así como para conectar con otras dimensiones. Concéntrese en la superficie negra del espejo y las visiones comenzarán a aparecer.

Espejo Mágico

Al hablar de los espejos mágicos, la primera referencia que se nos viene a la mente es el cuento de Blancanieves, donde su madrastra hacía uso de unos de ellos. A lo largo de la historia encontramos un gran número de referencias en relación al uso de espejos, cristales y fuentes como medio para hacer adivinaciones y otras actividades de corte mágico.

       Cristalomancia sería el término usado para llamar a ésta actividad, aunque también podríamos sustituirlo por el de catoptomancia.


        En otras palabras elaborar y usar un espejo mágico es una antigua tradición, la forma del cristal más recomendada es la cóncava, la razón según
Beverly Randolph es que las corrientes magnéticas, tienden a concentrarse en el centro del cristal permitiendo la visualización, otra explicación, que es la que da Franz Bardon tiene que ver con el elemento Akasha.

 

          Estos espejos metálicos, generalmente hechos a partir de bronce, y provenientes de la dinastía Han, consistían de una cara con símbolos o figuras y otra cara altamente pulida, el espejo en sí. Nadie sabía realmente por qué esto ocurría, es decir el reflejo que formaba las figuras de la cara opuesta, y llevaría casi 2000 años encontrar una explicación científica. La primera vendría de manos del cristalógrafo británico del siglo XIX Sir William Bragg. Quien diría que esto se debía a distintas densidades en la superficie reflectora del bronce. Nos obstante, sería Ron Edge, del Departamento de Física de la universidad de Carolina del sur, quien descubriría, tras estudiar la superficie con haces de luz concentrados, que en realidad la imagen del reflejo se formaba a partir de una serie de crestas y elevaciones imperceptibles en la superficie, las cuales emulaban perfectamente el dibujo de la otra cara. Las mismas solo se encuentran a 0.1 grados de elevación por sobre la cara reflectora.

 

         Estas “imperfecciones” son creadas como un subproducto del proceso de fabricación del adorno. Y es por esta razón que, al reflejar la luz, se generan contornos muy claros seguidos por líneas de menor intensidad. Logrando así un reflejo muy claro de la figura.


El Feng Shui, los utiliza para aclarar, amplificar, reflejar, proteger atraer o rechazar.

        En otras creencias, los espejos tienen un poder obscuro, tienen la capacidad de robar las almas, de hecho en algunos lugares es costumbre cubrir los espejos cuando alguien en la casa ha fallecido para evitar que su alma sea aprisionada en ellos, también se dice que los espejos deben ser retirados de los cuartos cuando se está enfermo, porque el alma es más vulnerable cuando se está enfermo en algunos sitios de Europa, se pensaba que si esto pasaba la persona se convertiría en vampiro.  
En Persia se piensa que se pueden ver fantasmas en un espejo si uno se cepilla el cabello sin pensar, hablar o moverse.


          También como en el feng shui, en la magia se considera que hay ciertas posiciones de los espejos que pueden generar energías enfermas o negativas, por ejemplo, no debe colocarse un espejo a los pies ni en la cabecera de la cama, ya que puede ser un portal para que las energías no deseadas (o llamadas por estar manejando una frecuencia baja)  entren a los cuartos, no debe haber espejos uno frente a otro, aunque generalmente los espejos no van a crear situaciones paranormales per se, si se detecta algún fenómeno continuo que se lleve a cabo en donde está el espejo, hay que quitar o cambiar el espejo de posición.

El poder de los espejos, es su capacidad de revelar lo que ha estado escondido y es sabido desde todos los tiempos.

         Los espejos también tienen uso ritual,  en los Sabats de Beltane se cree que las flamas de los fogatas puede ser reflejado por los espejos para amplificar la energía y el calor del fuego.  En Litha se colocan los espejos de forma que los rayos del sol puedan reflejarse de manera que todos puedan verlo y en Samhain es el tiempo para usarlos  para ver las energías del futuro año.

           El espejo tiene sus correspondencias con el elemento Agua, es femenino y está asociado directamente con la Diosa,  amor, belleza y compasión.   Los espejos usados para la magia, deben ser consagrados, limpiados con agua (ya que es su elemento) deben ser guardados siempre cubiertos en una bolsa o tela obscura en un sitio donde no se rayen ni se rompan.

        El espejo mágico es una herramienta a la que podemos acercarnos, pero debemos hacerlo con respeto, con amor y sin temor porque nos devuelve exactamente lo que le ponemos enfrente.

El Espejo Mágico Develado

           La captotromancia es el arte de adivinar por medio de espejos o cristales. Es una de las mancias más antiguas que existen. En el siglo II Pausanias la describe como una práctica realizada habitualmente en el Templo de Ceres en donde, tras invocar a la Diosa y ofrecer incienso, se mostraba al enfermo un espejo con el fin de presagiar el desarrollo futuro de su enfermedad. Otras figuras históricas, como el emperador Juliano o Apuleyo autor del "Asno de Oro", también se valían de los espejos mágicos (Marcelino Martínez y Pelayo. "Historia de Los Heterodoxos Espanoles". Libro I). Dentro del esoterismo moderno, existieron renombrados ocultistas, como Beverly Randolph o Franz Bardon, que incorporaron también esta práctica en sus enseñanzas.

       En su "Tratado de Medicina", Samael incorpora una explicación para desarrollar la clarividencia a partir de la utilización de espejos mágicos.


Samael Aun Weor en Tratado de Medicina escribió:

Los Espejos Mágicos son muy útiles en Magia Práctica. Escríbase sobre el Espejo Mágico las siguientes palabras Mántricas: “ADAM - TE - DAGERAM - AMRTET - ALGAR - ALGAS - TINAH.

Magnetice siempre su Espejo y úselo en Magia para ver clarividentemente lo que necesite. Guarde su Espejo o téngalo sobre su altar para que pueda utilizarlo cada vez que sea necesario.

Le aconsejo no espiar vidas ajenas ni tampoco calumniar a las gentes. La Clarividencia se desarrolla a condición de una conducta muy recta.

En los LUMISIALES GNOSTICOS no deben faltar jamás los Espejos Mágicos; las personas hipersensibles pueden ver en tales Espejos muchas maravillas de los mundos suprasensibles.

ADAM - TE - DAGERAM - AMRTET - ALGAR - ALGAS - TINAH

El origen de tales palabras podría hallarse en un cuadro del pintor Rembrandt titulado
"El doctor Fausto". En dicho cuadro aparece dibujado un estudioso realizando un procedimiento mágico, de pronto ve aparecer un círculo luminoso en la ventana de su laboratorio que sostiene con una mano, y con la otra señala, lo que parece ser un espejo.

-         En el círculo interior se puede leer INRI
- En el círculo intermedio se puede leer ADAM TE DAGERAM
- En el círculo exterior se puede leer AMRTET ALGAR ALGASTNA
(Obsérvese que Samael copia erróneamente los vocablos supuestamente mágicos). El cuadro parece estar inspirado en la leyenda de Fausto, muy famosa en la época del artista. El relato narra la aparición a Fausto de un luminoso ángel que le quiere avisar de no pactar con el diablo.

El significado de esta estampa ha sido objeto de las más diversas interpretaciones desde el siglo XVII hasta la actualidad. Básicamente representa a un personaje, probablemente un estudioso por los objetos que le rodean: libros, documentos e instrumentos científicos, sorprendido ante la aparición de una forma luminosa delante de la ventana. Esta enigmática aparición tiene por cabeza un brillante círculo de luz con una inscripción que, leída de dentro a fuera, dice: I / N / R / I // + ADAM + TE + DAGERAM // AMRTET + ALGAR + ALGASTNA ++; con la mano izquierda sostiene un objeto redondo, un espejo, que señala con la derecha. 


        Esta estampa, como la de la Melancolía de Durero o El gigante de Goya, continuará apasionando e intrigando a los amantes del grabado.
E. S. P.